Acción poética Colmenar del Arroyo

La Acción poética es un movimiento que nació en 1996 promovido por el mexicano Armando Alanís Pulido que comenzó a llenar de versos los muros de las calles de Monterey.

Luis Santos, poco antes de su muerte, era un poeta y diseñador gráfico que acudió al ayuntamiento con la propuesta de pintar las calles de este pueblo de la Sierra Oeste. La idea gustó mucho y se consiguió llevar a cabo con la colaboración de ayuntamiento y vecinos.

Versos, pero también letras de canciones o frases inspiradoras y optimistas servirán para decorar los muros de la localidad, en una iniciativa que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento. El objetivo de esta «noche de pintadas», según explica el grupo, es que la poesía «deje de ser arma de futuro para convertirse en arma de presente para todos».

Santo eligió 20 frases que decorarían las paredes del pueblo. La avenida de España, la travesía principal, sigue presidida por el poema que escribió. En ella, Santos pide perdón a su maestro, Antonio Machado, por parafrasearle y cambiar el final de uno de sus versos más universales: “Caminante no hay camino, se hace camino al amar (por andar)”. Las palabras sustituidas se resaltan en un tono anaranjado. La iniciativa tuvo tan buena acogida que todos los vecinos quisieron llevar los versos a sus fachadas, así que el verano siguiente se realizó una segunda pintada. Para entonces, Santos ya había fallecido.

Las frases no están elegidas al azar si no que cada uno tiene que ver con el negocio de esa fachada o con quien habita en ella.

Barbero relata que en la fachada de su abuela Candelas, en la calle de Gonzalo Mora, dice: “Pistolas sí, pero de las que matan el hambre”. La mujer fue panadera, vivió la dureza de la Guerra Civil y cuando sus clientes le pedían tal modalidad de pan, ella siempre respondía de esa manera.

Comamos y bebamos / cantemos y dancemos / que mañana ayudaremos”, dice otra frase frente al mesón de Doña Filo, un restaurante que llegó a contar con una estrella Michelin entre 1999 y 2009. En el municipio apenas hay un puñado de negocios. La mayoría de sus habitantes trabajan fuera, pero prefieren vivir aquí, rodeados de naturaleza.

Esta iniciativa trae a muchos turistas a este pequeño pueblo y es por eso que se llevan a cabo tareas de mantenimiento de las más de 100 frases que hay actualmente en los muros de Colmenar del Arroyo.

Además si quieres aprovechar la visita puedes rellenar el día con más cosas que hacer en Colmenar del Arroyo.